Híspalis, un sevillano más

Después de vuestras sugerencias para que contestara -al igual que todos- al cuestionario, a continuación he respondido como he podido a todas y cada una de las preguntas. Espero que de esta forma me conozcáis un poco mejor…

Fecha y lugar de nacimiento: Cruz Roja de Triana (calle San Jacinto) un 23 de septiembre de 1977.
Profesión o estudios: Licenciado en Ciencias de la Comunicación.
¿Hijos? ¿hermanos?: Una hija (Laura) y dos hermanas mayores que yo (Loli y Rocío).
Vivo en: Casco Histórico (rodeado de multitud de iglesias).
¿Cómo es un día normal en mi vida desde que te levantas? De Lunes a Viernes me levanto temprano, a eso de las 7:30 para dirigirme al trabajo. Lo primero que hago una vez que llego es ‘empaparme’ de noticias, de todo tipo: nacionales, económicas, regionales, políticas, etc. (Cuando tengo algo más de tiempo me leo incluso varios periódicos, de cabo a rabo). Sobre todo intento estar atento de cualquier noticia que tenga que ver con mi ciudad. Además, trabajo escuchando todo el tiempo la radio donde también escucho noticias, tertulias, debates, etc. Al medio día tengo una hora y media aproximadamente para almorzar. Luego al trabajo de nuevo para echar unas horas más, depende de los días. El fin de semana es entero para mí, aunque en estos momentos pueda decir que es entero para mi familia, más que para mí.
Un recuerdo inolvidable: Por cercanía, el nacimiento de mi hija Laura, esa primera vez que la cogí en brazos y me miró a los ojos como si me conociera de siempre. Nunca lo olvidaré. También podría citar cuando mi Betis ganó la final de la Copa de Su Majestad el Rey en el Vicente Calderón, fui con mi cuñado Pedro y nos lo pasamos en grande, como niños. Nunca lo olvidaremos. Por último, también tengo grabado en mi mente aquella primera vez que el Señor de la Salud hizo de una sola chicotá la Campana entera. Iba detrás de él, muy cerquita con una cruz sobre mis hombros, y lloré de emoción al ver cómo Sevilla ovacionaba a mi Cristo con aplausos eternos. Nunca lo olvidaré.
Mi principal virtud: Es más adecuado que lo expresen los que me conocen.
Mi principal defecto: Confiar plenamente en las personas. Pensar que todos somos buenos.
Un libro que nunca olvido: “Dios vuelve en una Harley”, de Joan Brody. No es un gran libro pero lo leí por primera vez en uno de los peores momentos de mi vida, me ayudó bastante.
Mi música preferida: Semana Santa por encima de todo. La escucho siempre, sea el mes que sea. Mi padre era y es así también y cuando era pequeño lo que más escuchábamos en casa era ese tipo de música (desde marchas, pregones, sevillanas cofrades, etc). También me encanta el grupo ya desaparecido ‘Triana’ y sevillanas de todo tipo. Y por último, escucho algo de música comercial pero nunca canciones de verano que sólo hacen ruido.
Un lugar para trabajar en Sevilla: Cualquier sitio o lugar que tuviera buenas vistas a la Giralda y Catedral. Sería maravilloso que desde tu despacho pudieras ver esta joya histórica sin tener que conformarte con sólo el fondo de tu escritorio.
Un lugar para descansar en Sevilla: Como en casa no hay nada.
Un lugar para vivir en Sevilla: En el centro, por ejemplo: La Alfalfa. Así podría ver pasar muchas cofradías en Semana Santa.
Un sitio donde dar el primer beso de amor: Plaza de Doña Elvira o cualquier noche de verano en mitad de la calle Betis.
Sevilla o Betis: Real Betis manque pierda.
Cuando hablo de Sevilla presumo de: Su cielo, su cultura, lo bien que se vive aquí y sobre todo su Semana Santa.
Sevilla podría mejorar si: Estuviera más limpia y cuidada. No se pensara tanto en futuro (2020) y se centrara más en los problemas del presente. Se rehabilitaran obras de artes como Santa Catalina y no se construyeran proyectos faraónicos que alteran de forma grave, innecesaria y costosa entornos de gran valor histórico y arquitectónico. Y es que el progreso, el desarrollo de una arquitectura moderna en los ensanches, en las zonas de expansión urbana, es compatible con la preservación del legado histórico que hemos recibido, que está protegido por el ordenamiento jurídico, y que, además, estamos moral y legalmente obligados a preservar y trasmitir a la siguiente generación. También Sevilla podría mejorar si no se realizaran todas las obras al mismo tiempo. Existiera un transporte público acorde a la demanda que existe (el retraso del metro está causando graves problemas), la movilidad del tráfico se solucionara, el centro se peatonalizara y, sobre todo, se vigilara y potencializara mucho más el Turismo, que es nuestro pan de cada día.
Un personaje histórico sevillano: Santa Ángela de la Cruz.
Alguien a quien admiras de tu vida: Mi madre.
Un dolor imborrable: No hace muchos años pasé por los peores momentos de mi vida, aún no estoy del todo recuperado pero al menos mucho mejor que durante esos días que viví casi encerrado en un piso sin querer salir y subiéndome por las paredes. De todo se aprende, y más de lo malo.
Una calle de Sevilla: Betis.
Si fueras Alcalde de Sevilla lo primero que haría: Rebajarme el sueldo por cuestión de ética y moral (nuestro Alcalde es de los que más cobra de España). Siempre escucharía la voz del pueblo, sus inquietudes, opiniones, etc. Es decir, nunca realizaría ninguna obra faraónica sin tener el consenso el pueblo por medio de votación o jornadas de participaciones abiertas. Pondría más seguridad en las calles, lucharía por construir más VPO y fomentaría distintos tipos de ocio (Conciertos, teatros, entradas más baratas para cines, torneos deportivos, concursos, etc) para que los jóvenes puedan divertirse sin tener que recurrir siempre al alcohol. Por último, creo que no contrataría nunca a ningún primo mío, por lo que pudiera pasar…
Decidí abrir un blog porque: Quería hablar sobre Sevilla.
El primer blog que visité fue: Cómo no, el de mi amigo Ramsés Torres. El Aguaó de Sevilla.
La entrada que más valoro de mi blog: No tengo ninguna en concreto, pero quizás, por decir algunas, la que hablé del nacimiento de mi hija Laura o la que dediqué a mi amigo Ramsés, ambas las escribí desde el corazón.
¿Has conocido a otro editor de blog como tú? No.
Si Sevilla fuera un olor sería: Incienso mezclado con azahar.
Si Sevilla fuera una tapa: Espinacas del Rinconcillo.
Si Sevilla fuera un sonido: Bambalinas rozando con unos varales y de fondo el rachear de unos costaleros.
Si tengo que hacer un regalo sevillano: Una Giralda en bronce o un puente de Triana también en bronce.
Si tengo que enseñar Sevilla a unos amigos extranjeros la ruta sería: Empezaría llevándoles a desayunar al restaurante de mi amiga Vicky ‘Baco, Victoria Eugenia’, luego Alfalfa, Salvador, Sierpes, Tetuán, Francos, Giralda, Catedral, Alcázares, Barrio de Santa Cruz, almorzar o tapear en el Rinconcillo, helaíto de Rayas, visita obligada al Señor de Sevilla, luego a la Macarena y después Maestranza, y cuando casi cayera el sol de la tarde adentrarnos por el Puente de Triana hacia calle Betis, allí mirar Sevilla desde la otra orilla, sentarnos hasta que se haga de noche… caminar y conocer los entresijos y leyendas de Triana, tapear por sus bares, conocer su gente, etc. Y quizás terminaría llevándolos a cenar a cualquier restaurante del centro que tuviera buenas vistas de Sevilla…
Si estoy lejos, lo que más echo de menos de Sevilla: Mi familia.
Sevilla en dos palabras: Mi vida.